«Tanya (de origen ucraniano) se encarga de la cocina en casa y de que los niños nunca estén solos». «Yo me he refugiado en el trabajo y gracias al soporte emocional de mi familia puedo seguir adelante».
Dana tiene tres hijos maravillosos y hasta hace dos años estaba casada con Donald C. Liu, nombrado Chicaguense del año en 2.012 considerado uno de los cirujanos pediatras más importantes de Norte América.
Salieron de fin de semana con los niños a disfrutar cerca del lago Michigan y Donald, al ver a dos chicos en apuros navegando en kayak se lanzó a salvarlos. Con suerte los sacó de las heladas aguas con vida, pero él no regresó.
Genevieve, Gene, su hija mayor, con tan sólo 15 nos conmovió con su historia el día que se hizo amiga de mi hija y nos explicó, con una inusual madurez, cómo había creado una página web en la que ella misma ayuda a otros adolescentes con su experiencia, a superar la perdida de su padre o madre.
Hoy, un año más tarde de comenzar con esta tarea, da trabajo a varias personas y se encarga de administrar y dirigir SLAPD, actividad que compagina con sus estudios de bachillerato.
Mi hija y Gene se hicieron muy amigas las pasadas navidades y al saber que visitaríamos su ciudad, ella y su madre, insistieron en recibirnos en su casa por unos días.
Con mi inglés tan limitado y mi torpeza para expresar emociones cuando estas me superan, no me quedó más remedio que enfundarme el delantal y pedir que me enciendan el horno.
Porque a mi no me dan miedo los fogones y porque creo que no hay mejor manera de expresar amor, respeto y agradecimiento que cocinando para alguien.
Dos bandejas de cupcakes para los niños, un salmorejo de cerezas y un arroz para olvidar, fueron mi manera de corresponder al cariño y la hospitalidad recibidos, por parte de una de las familias más entrañables que la vida ha tenido a bien poner en mi camino.
La receta del salmorejo se la quedó Tanya apuntada, pero estoy segura de que le encantará tener también la de estos Cupcakes con los que hacer felices a Asher y Amelie.
A ellos, a los peques de la casa, va dedicada mi receta de hoy. Con todo mi cariño.
Espero que os guste. Besos.
Para las Cupcakes de Chocolate Negro (16 unidades)
– 115 gr de mantequilla a temperatura ambiente.
– 220 gr de azúcar.
– Una Cucharada de Ralladura de Piel de Naranja.
– 3 huevos.
– 270 gr de harina.
– 40 gr de cacao en polvo sin azúcar.
– 1 Sobre de levadura tipo Royal.
– 120 ml de leche.
Material extra
– Cápsulas de papel de color Rojo.
– Molde para Muffins.
– Cuchara para helados.
Paso a Paso
Ponemos el horno a calentar a 180ºC mientras preparamos la masa. Para ello (con un vaso eléctrico, amasadora, batidora o termomix) batimos la mantequilla junto con el azúcar y la ralladura de naranja ( en TMX 1 minuto velocidad 4). A continuación añadimos los huevos uno a uno sin parar de batir (a velocidad 5) durante 3 minutos más, hasta que estén bien integrados. Añadimos entonces la harina, la levadura, el cacao y comenzamos a batir nuevamente a velocidad 4 y le incorporamos la leche (mientras batimos) en último lugar, a la misma velocidad, durante 2 minutos, hasta tener una masa fina. Ya tenemos la masa lista.
Para la Buttercream de Sirope de Arce
– 250 gr. de Mantequilla sin Sal.
– 2 Cucharadas de Sirope de Arce.
– 300 gr. de Azúcar glasé,
– 25 gr. de Leche.
Material extra
– Manga Pastelera grande (puede ser desechable).
– Boquilla Estrellada (he usado la Wilton 2D).
– Batidora de Varillas.
Paso a Paso
Una vez tengamos los cupcakes fríos, preparamos la buttercream.
Agregamos el sirope de arce a la leche y reservamos. Ponemos en un bol no demasiado grande, el azúcar glasé y la mantequilla. Batimos a velocidad media con las varillas y cuando estén bien integrados le incorporamos la leche con el sirope y batimos a velocidad un poco más alta durante 2 minutos. Una vez lista la ponemos en la manga pastelera.
Preparamos la manga pastelera colocando la boquilla y la metemos en un vaso grande para que sea más fácil rellenarla con la buttercream.
Una vez rellena la manga, pasamos a decorar las cupcakes. Primero, metemos los cupcakes en una cápsula de papel nueva, para que queden más vistosos, y comenzamos a decorar con la buttercream; de dentro a fuera, formando una rosa y rematamos con una estrellita y un corazón de azúcar.
Listos!!!!!!!
Y ahora para los que tengáis ganas de ver algunas fotos más; os dejo un resumen de mi paso por Chicago.
Chicago. The Windy City.
Todo brilla, aunque el sol se escondió hace rato y recuerdo entonces las palabras de mi amiga Diana, (a la que veré al día siguiente) cuando orgullosa decía que su ciudad, Chicago, para ella es la «Number One».
Mesa en una Pizzeria. Por fin!!!!!!
Millenium Park
De paseo por el Down Town
Dejamos el parque para acercarnos al punto de encuentro y, mientras paseamos, nos damos cuenta de que, a pesar de lo impresionante de sus rascacielos, Chicago es una ciudad que invita a disfrutar también de sus calles y numerosas plazas. Grandes avenidas salpicadas de cuidadísimos jardines, donde las proporciones se humanizan. Una arquitectura pensada al milímetro en pro del ciudadano.
Navy Pier
De entre los muchos locales a elegir para el almuerzo, ha sido inevitable nuestra visita al «Bubba Gump», una cadena de restaurantes creada a raíz de la famosa película Forrest Gump (una de las favoritas de mi hijo).
Gambas de mil maneras distintas en un ambiente de lo más cinematográfico, del que me marché con el sobrenombre de «Jennnny».
Al salir nos aguardaba una gran sorpresa. Nuestra querida Genevieve Liu, no ha podido esperar a mañana y ha venido a buscarnos.
El Kinzie Hotel, un establecimiento estupendo. |
El Chicago Cut.
Nuestros amigos Diana y Paul han reservado mesa en el Chicago Cut. Un Seteakhouse increíble, en el que nos invitaron a tomar unos deliciosos cortes de carne. Me volvieron a cantar Cumpleaños feliz y brindamos mientras nos desvelan una gran noticia que guardaban para el final de la cena. Pronto cumplirán su sueño de ser padres y yo les deseo toda la felicidad del mundo.
Con la lluvia decidimos no llevar la cámara de fotos, afortunadamente he encontrado ésta en la red, que tiene una gran calidad. |
The Willis Tower. El Top of The Rock de Chicago.
más souvenirs!!!!!
La hora del Almuerzo.
En el distrito financiero, abundan los puestos de comida ambulantes. Me llamó la atención la variada oferta y la calidad de algunos de ellos.
Pero hemos optado por tomar un aperitivo y buscar, el que nos han dicho es, el mejor sitio de perritos calientes del mundo. No es mi comida favorita pero…los niños mandan!!!
Una vez allí nos hemos asustado de las enormes colas y hemos decidido volver a una pizzería con muy buena pinta que hemos visto durante el camino.
Maggiano´s, un gran local familiar de comida italiana, en el que uno parece regresar al Chicago de Al Capone. El ambiente y la comida son muy agradables.
Walk, Coffee and Shopping.
Y para cenar…por fin hemos conseguido una mesita para dos en la Siena Tavern (muy cerquita del Kinzie Hotel). La comida is ok, pero en la terraza, bajo enormes rascacielos y a pesar de estar rodeados por millares de arañas acechando para atacarte (no en vano Spiderman se rodó por aquí cerquita), el ambiente es súper agradable. Será por eso que siempre, siempre hay cola.
En casa de los Liu.
Área universitaria de la Universidad de Chicago.
En estas calles tuvieron su primera cita el actual presidente de los EEUU de América y la primera dama. Es curioso que exista una placa donde se recuerda este hecho anecdótico. Os imagináis un monolito recordando la primera cita de Rajoy? Mmmmmmm…………creo que no.
Hora del lunch en un excelente Sushi bar, donde te empaquetan lo que te dejas en el plato para que te lo acabes en casa.
Matrículas.
Botani en el Súper.
El Brunch de Dana.
Museum of Science+Industry
Me ha costado sacar a mi hijo de la sala de las maquetas y réplicas de aviones y trenes. Pero hay tanto que ver…. vamos a dar un paseo por el Chicago de principios del siglo XX, donde se recrean sus calles e incluso puedes tomar un helado en un local ambientado como si estuviéramos en otra época.
Paseamos por la historia más reciente de la ciudad a través de objetos cotidianos.
Y llegamos a un espacio en el que relatan de una forma muy gráfica la participación de EEUU en las grandes guerras y la carrera espacial americana.
Llegó el temido lunes y con él la hora de las despedidas, siempre duras. Nadie quiere mostrar su cara triste para la foto.
Días inolvidables quedan en la memoria, junto a la promesa de volver a verse pronto.
Una vez en el aeropuerto,después del check-in y un café, nos preparamos para nuestro próximo destino pero….
Una tormenta se acerca y el espacio aéreo se cierra. Tendremos que hacer noche en un hotel cercano al aeropuerto. Tras horas de espera, toca recoger maletas y tratar de descansar. No todo iba a ser diversión!!!!!
Ahora si que nos vamos; próximo destino: La ciudad que nunca duerme.
Mi extraño desayuno. Es que el café del avión es maliiiiisimo 😉 |
Continuará…
1 comentario
Que historia tan terrible, pero que familia más valiente, seguro que tú con tus cup cakes les trasmitiste muchísimo cariño y ternura. Precioso viaje
Besos