Pensé que migrar era una acción atribuible tan sólo a los seres vivos. Pájaros que recorren largas distancias en busca de climas más cálidos, personas que se trasladan a lugares nuevos para alcanzar una mejor calidad de vida…. pero un blog??? puede migrar un blog??? pues sí, y aquí tenéis la prueba.
Después de casi un trienio editando desde la plataforma blogger, «Ya sé lo que quiero» hace las maletas y se instala en Word Press con la intención de adquirir una mayor calidad y ofrecer todas las prestaciones que una página web pone a mi alcance. Creedme si os digo que no sé muy bien lo que significa esto que acabo de deciros, ni lo que terminará por suponer esta metamorfosis que ha vertido un millón de mariposas en mi estómago.
Desde siempre me han asustado los cambios; enfrentarme a lo desconocido me genera un vértigo probablemente innecesario; quizás por la necesidad de controlar mi entorno, de saber donde piso y tener la certeza de que puedo cumplir con aquello que se me plantea o con lo que me comprometo. Por eso vislumbro el año 2015 como un salto al vacío sin red.
Lo normal hubiese sido comenzarlo con una reflexión de lo personal y lo mundano; hacer balance de cuanto se me quedó en el tintero y dibujar un planing de las metas a cumplir, por aquello de seguir avanzando, de crecer como individuo, de no quedarme atrás o estancada.
Pero mi afán y extraordinaria necesidad de pasar estás navidades en casa, disfrutando de la familia y amigos, me han hecho perder la noción del tiempo de manera que, entre cocinar, poner y quitar la mesa y asegurarme de que las copas estuviesen siempre prestas para ser llenas y alzadas, las fiestas me han pasado por encima como un huracán y ahora me encuentro en plena mudanza blogueril, con la mitad de los cacharros por empaquetar, fotos por colocar y la sidebar hechas unos zorros.
Enero vuela en el calendario y están por perfilar el nuevo diseño y estructura mientras preparo además mi nueva entrega culinaria con la que inaugurar esta nueva etapa de mi blog.
Estoy asustada, porque ni tan siquiera he tomado consciencia de a dónde quiero llegar.
Solo sé que es momento de dar un paso más, asumir el riesgo sin dejar por supuesto de seguir dando prioridad absoluta a la publicación de buenas recetas que merezcan tu atención.
Ya sé lo que quiero, se transforma con la intención de llegar a muchos más de vosotros y quién sabe si para conseguir que mi, hasta ahora, ventana particular se convierta en un pequeño escenario gastronómico en el que tú podrías ser el protagonista.
Agradezco vuestra paciencia. Volveré dentro de pocos días mientras, sin pausa pero sin prisa, aprovecho este paréntesis para ver como reparto mi tiempo y mi vida en esta nueva etapa.
La cuenta atrás de 365 nuevas oportunidades se ha puesto en marcha y quiero sacar lo mejor de ellas.
Me acompañas?
Besos.
Lourdes.
10 comentarios
¡Hasta el infinito, y más allá!
No te deseo suerte porque no la necesitas, tu maestría y tu estilo en la cocina (y en la vida) te hacen valedora de todo el éxito del mundo.
Te seguiré de cerca para no perderme ni un gramo de comino
Gracias AMIGA!!!❤️
Yo te seguiré a donde vayas, y tranquila estando tu detrás el éxito está asegurado.
Besitosss guapa
Mil gracias corazon
Yo te acompañare al fin del mundo si hace falta!!! mucha suerte corazón, te la mereces toda!!!
Besos!!!
Lo sé corazón y TQ. Gracias!!!!!
Hola Lourdes,
Primero de todo, enhorabuena por el cambio y mucha suerte en esta nueva andadura (yo también he querido migrar en esto de los blogs y aún estoy en el intento, jeje… tarea pendiete!) Me ha gustado mucho el post, sobretodo por el positivismo y la alegría que transmite. No sabía de ti, pero ya te sigo en las redes, así que, aquí tienes a una viajera más. Un saludico!
Raquel
Gracias Raquel, encantada de tenerte por aquí, voy a pasarme por tu web. Un beso
Lourdes,
Muy bein dicho todo. Vaja con mucho exito!
Your blog looks great, if there is a mailing
list please post me. I live in El Puerto de
Santa Maria, Cadiz
Gracias Geraldine, ya puedes suscribirte tu misma al blog. Será un placer tenerte de segudora. Un beso.